Son numerosos los pacientes que acuden a consulta con falsos mitos sobre la hipnosis clínica o médica. Creo que os puede resultar interesante que os hable de ellos.
Esto no sucede así. Al contrario; se mejora la concentración y se focaliza de una forma poco usual. Ya que si la persona perdiese la conciencia, el profesional no podría comunicarse con el paciente que efectúa la terapia y no podría "sacarle" de ese estado.
Este mito se mantiene debido a la creencia popular que para ser hipnotizado hay que tener los ojos cerrados. El hecho de cerrar los ojos es porque se facilita la concentración, pero se puede hipnotizar a una persona con los ojos abiertos.
Si no hay voluntad por parte de una persona para ser hipnotizada, no habrá hipnosis. No puede inducirse la hipnosis sin la colaboración del sujeto.
Esto es falso, ya que las personas hipnotizadas no se hallan dominadas por el profesional. Poseen completamente intacta la capacidad de tomar decisiones. Si se le manda a una persona que haga algo en contra de su voluntad o de su código de conducta personal, ésta saldría de inmediato del estado de superconcentración. Las personas "obedecen" a lo que ellas quieren, nunca contra su propia voluntad.
Algunas personas piensan que una vez están en estado de superconcentración pueden recordar con una precisión absoluta todas las experiencias pasadas. Pero esto no sucede así, la persona puede fabular e inventarse una historia sobre su vida.
Cualquier persona puede aplicar la técnica. No se precisa tener ningún "don" para aprender las técnicas para relajar a la persona y hacerla llegar a un estado de superconcentración.
La mayoría de la gente recuerda todo o casi todo lo que se le dijo e hizo mientras estaba en ese estado.
Debemos entender que la hipnosis no es una terapia por sí misma. La hipnosis sólo es una técnica específica que puede ser provechosamente empleada por los profesionales de la salud dentro del contexto de la práctica profesional de cada uno.
Falso. Todas las personas pueden ser hipnotizadas. Si esto fuera cierto, todos seríamos crédulos o poco inteligentes. Este mito lo realimenta la hipnosis de espectáculo en el que se ve como las personas hacen “tonterías” para ganar audiencia.
Esta hipótesis no sólo nunca se ha observado, ya que miles de sujetos han sido hipnotizados en varias ocasiones sin apreciarse ningún daño psicológico ni físico, sino todo lo contrario, un beneficio. Como cualquier técnica puede ser peligrosa en manos de un “no profesional”.
Una vez hemos desmontado los falsos mitos sobre la hipnosis, ya sabes que puede resultarte muy útil en tu vida. Si necesitas ayuda estamos para ayudarte. Puedes ponerte en contacto con Nuria Marco para superar este momento incómodo por el que estás pasando.